¿BERGOGLIO LOS HABRÁ LEÍDO? (Avisos del Papa San Gregorio el Grande)

En su Liber Regulae Pastoris San Gregorio recomendaba:

A veces el pastor, por el hecho mismo que está colocado en un grado superior a los otros, se ensoberbece con pensamientos de orgullo. Como todas las cosas están puestas a su disposición; como lo que él ordena es ejecutado rápidamente conforme a sus deseos; como todos lo que están bajo sus órdenes le prodigan alabanzas cuando lo que él hace está bien, pero no oponen ninguna crítica a sus acciones reprensibles; como casi siempre las halagan antes que reprobarlas, sucede, que, seducido por estas bajezas, su alma se infla de presunción y que, recibiendo aplausos ensordecedores, esté interiormente vacío de la verdad. Ignorante de sí mismo, él desestima la opinión de otro.

Él desprecia a quienes le están sometidos, olvidando que son sus iguales en el orden de la naturaleza y se imagina, al mismo tiempo, que por el mérito de su vida sobrepasó a aquellos sobre los que ejerce su poder. Y se aferra a su propia opinión, como si se tratase de un pedestal.

(L.Génicot. La Spiritualité Médiévale, Librairie Arthème Fayard,Paris, 1958, pág.31)